Las exhibiciones taurinas son el epicentro de las fiestas patronales de Borriol, con la ocupación de alrededor del 50% del programa de actos, que este año ha apostado por diversificar sus eventos y compaginar los astados con otras actividades. Apuesta que se demostró en las jornadas de ayer.
El día arrancó con una concentración de niños y perros organizada por el Club de Caça la Muntanya, tras la cual se realizó un pasacalle por las calles del casco urbano. Por la tarde, se llevaron a cabo actividades para los más pequeños en el Cactus Town, pero, sin lugar a dudas, el acto más esperado fue el del baile de disfraces, en el que los vecinos pusieron en juego su ingenio.
Estos eventos se completaron con actos taurinos como la prueba de una vaquilla cerril de la ganadería local Daniel Ramos, a las 18.00 horas, que posteriormente fue embolada. H
