El Ayuntamiento de Burriana ya acumula cuatro trimestres consecutivos cumpliendo con el pago a proveedores dentro del plazo legal de 30 días. Así lo aseguró ayer la concejala de Hacienda, Cristina Rius, y así se recoge también en el expediente de liquidación del presupuesto municipal del consistorio del pasado año.

Se trata de un logro que se alcanza por primera vez desde que se estableció en 30 jornadas el máximo legal para hacer efectivo el abono de las facturas.

El consistorio burrianense finalizó el pasado 2016 sin facturas sin consignación presupuestaria y logró reducir el endeudamiento del 48% al 37,4%. Además, se cumplió el requisito de la estabilidad presupuestaria, aunque no el de la regla del gasto, que indica que no puede gastar más del PIB del ejercicio anterior.

Rius apuntó sobre esta cuestión que «no se ha conseguido este requisito porque hemos tenido que hacer frente a obligaciones, como abonar la paga extra que en su día se suprimió a los funcionarios y que estaba pendiente de ingresar, por 240.000 euros; pagar una sentencia judicial de 62.500 euros o cumplir con 1,7 millones de euros de expropiaciones por justiprecio según quedó dictaminado en los tribunales».

El incumplimiento es de 1,5 millones de euros, pero justificados como gastos coyunturales con un plan económico financiero. El PP calificó esta situación de «barra libre, priorizando caprichos y sin cumplir la ley».