La playa de Burriana contará este verano con un chiringuito menos, ya que su propietario decidió no renovar la concesión este año y ninguna empresa ha pujado por este puesto en la convocatoria que sacó el Ayuntamiento. Tampoco se han logrado cubrir para esta campaña las vacantes de los puestos de hinchables dentro del agua ni el puesto de hamacas, cuyo concurso quedó desierto.

Los técnicos municipales, sin embargo, sí que están estudiando las propuestas que se han recibido por los otros dos chiringuitos (uno en terreno municipal y otro sobre la arena) cuyo gerente tampoco había renovado el contrato. La próxima semana se sabrá a quien se le adjudican pero éstas, salvo algún defecto de forma, sí que tendrán concesionario.

Cabe recordar que el consistorio burrianense sacó el pasado año la concesión para cinco anualidades con la intención de dar estabilidad a los empresarios del ocio veraniego y así evitar tener que sacar el concurso cada año pero, al quedar vacantes, se ha visto obligado a convocarlo de nuevo para ocupar estas plazas.

Por otra parte, hay que señalar que los trabajos de montaje ya han comenzado en la mitad de las instalaciones que se montarán este verano. Los tres merenderos son los que llevan las labores más avanzadas y, de forma casi paralela, con la instalación de la estructura para, después, comenzar con la parte interior de los negocios. Aunque arrancaron la pasada semana, les quedan varios días de intenso trabajo. En una situación similar está el único chiringuito, que ya ha comenzado a montar la estructura. H