Benicàssim pondrá en marcha antes del verano una línea de autobús rápida que conecte durante todo el año la localidad con Castellón. El objetivo es dar respuesta a las necesidades de los benicenses, que llevan años reivindicando una mejora del transporte público con la capital de la Plana. Esta fue una de las peticiones formuladas en el consejo de participación ciudadana y que se llevará a cabo este ejercicio.

El Ayuntamiento, que preside la popular Susana Marqués, ha comprometido una consignación cercana a los 40.000 euros en el presupuesto de este 2016, aprobado recientemente en sesión plenaria. La cuantía se ha previsto tras haber realizado una estimación con la empresa.

El siguiente paso será solicitar la pertinente “autorización a la Generalitat valenciana”, puesto que es el órgano competente que determina las líneas de autobús, según explicó la alcaldesa. “Y una vez salvado este trámite, activaríamos el servicio, si todo es favorable”, indicó la primera edila.

La idea es que el bus realice el recorrido por la CV-149 hasta la capital de la Plana, con una frecuencia establecida y pocas paradas, puesto que el objetivo es ganar rapidez en el trayecto. “Nos gustaría que esa frecuencia rápida existiera para la gente que va a trabajar y a estudiar a la Universitat Jaume I (UJI) o otros centros formativos de la ciudad. Además evitaría que muchos cogieran su vehículo particular”, destacó la alcaldesa de Benicàssim.

El concejal del área de Movilidad, Arturo Martí, añadió que todavía queda pendiente, por tanto, “determinar las paradas y perfilar el contrato”. “También se estudiará la emisión de unas tarjetas para residentes con el objetivo de que resulte más económico”, concluyó el edil.

40 minutos de trayecto // En la actualidad hay una línea de autobús que une Benicàssim y Castellón durante todo el año, pero que realiza parada en toda la zona de apartamentos y las villas de la playa, lo que hace que cada trayecto a la capital se alargue a unos 40 minutos y que, durante el periodo estival, incluso sea más largo. “También hay otro bus que va directo a Castellón, pero solo en horario muy limitado”, según recordó la primera edila, quien añadió que la otra opción de transporte público es el tren, “pero solo hay unos pocos al día, a horas muy concretas, que no se adaptan a todas las necesidades de los vecinos de Benicàssim”. Aunque en el caso del ferrocarril, el viaje es también muy rápido, pues se completa en solo siete minutos, la ampliación de los cercanías hasta Benicàssim es otra de las principales reivindicaciones históricas de los vecinos en materia de transporte público. H