Las fiestas patronales de Sant Vicent en la Vall d’Uixó clausuraron ayer su programación taurina con un herido por cornada en la exhibición de los tres últimos toros cerriles de los nueve programados, cerrando así un cartel en el que han habido más luces que sombras, por presentación y juego de los astados, como se pudo comprobar ayer, donde hubo un poco de todo. Incluso una asistencia sanitaria, la única de las fiestas. Un rodador de Jaen fue alcanzado por el primero de Torrealba, que le empitonó en la rodilla derecha aunque, por suerte, se quedó en: «desestructurado de la cápsula articular, rompiendo la piel en superficie», según el parte médico. El herido fue trasladado al Hospital de La Plana.

Y es que los bous al carrer acapararon la programación. Primero con el ejemplar patrocinado por la comisión y a continuación con el de la peña Tacaet, ambos de la misma ganadería, para llegar a la hora de la cena con un bou embolat para los más pequeños.

El día se cerró con el estreno de la peña El Muret, que se ha creado este año para colaborar en el patrocinio del último toro embolado de las fiestas, junto a la Tendido 7 (al cierre de esta edición no había finalizado). Según una de sus miembros, Esther Porcar, «en diciembre se planteó la posibilidad de no hacer el último embolado por razones presupuestarias y decidimos colaborar para que la gente tuviera embolada sin gastar más la comisión».