Llucena sigue inmersa en sus fiestas y ayer celebró el día grande de Nuestra Señora de la Asunción, titular de la parroquia, con su tradicional jornada dedicada al turista. «Un día que cada año dedicamos a quienes vienen de fuera, a los visitantes, para regalarles nuestros productos típicos acompañados de moscatel», señalaba el alcalde, David Monferrer.

Con intensidad vivieron los lluçeners este día que comenzó, a las seis de la mañana, con el canto del Rosario, por las calles de costumbre. A las 11.30 horas, el párroco, mosén Ramón Seguer, celebró una eucaristía a la que no faltaron las reinas mayor e infantil, Patricia Tárrega y Paula Flor. Después, frente al consistorio, se repartieron productos típicos como cocs con almendra y miel, acompañados de vino dulce.

Los actos taurinos coparon el programa de la tarde con la exhibición de vacas de Benavent de Quatretonda (Valencia) y la prueba de un astado cerril de Joao Ramalho, que se emboló por la noche. Una discomóvil completó la jornada festiva de ayer.

Los bous de carrer también serán hoy protagonistas, de manera que, tras la prueba de vacas de Germán Vidal, se exhibirá un astado del hierro de Torrealta.