La consellera de Infraestructuras, Territorio y Medio Ambiente, Isabel Bonig, se reunió el ayer miércoles con los representantes de la cofradía de pescadores de Burriana y les trasladó el compromiso de autorizarles a que hagan las obras que sean necesarias para que se pueda retomar la tradicional venta de morralla. Y es que es imprescindible cumplir unas exigencias sanitarias y ahí irán encaminadas las actuaciones que acometerá la propia entidad del municipio. Entre otras cosas, se cerrará el punto de venta del pescado y se llevará hasta allí una acometida de agua.

La previsión es que todo ello se acometa ya en el 2015 y que esté finalizado antes del verano ya que la venta de la morralla es, dijo Bonig, “un atractivo turístico” y añadió que recuerda cómo, de pequeña, “venía de otras poblaciones a comprar pescado de primera calidad que no tiene salida en la lonja”.

Por otra parte, la consellera Bonig anunció que se acometerá, con cargo a su Conselleria, la reparación del pantalán en el que se amarran las embarcaciones de trasmallo, las más pequeñas del puerto. Además, se contempla también sacar del mar una barca que se hundió al final del pantalán y que dificulta bastante a los marineros en sus tareas de entrada y salida de amarres. Así, para toda estas actuaciones está previsto invertir aproximadamente de 50.000 euros.

cRÍTICAS DE LA OPOSICIÓN // Los dos partidos de la oposición criticaron ayer que se enteraron “de casualidad” de que la consellera estaba en el puerto de Burriana. En este sentido, el socialista Vicent Aparisi, lamentó que “el PSOE fue el que presentó una moción en el pleno y consiguió apoyo de unanimidad para que se restableciera la venta de la morralla y, ahora, no nos avisan sobre este tema”. H