La adjudicataria de la construcción del colegio Regina Violant de Almassora ha exigido a la Generalitat valenciana un modificado de obra por importe de 1,2 millones de euros. Así lo confirmaron ayer fuentes del equipo de gobierno que un día antes lo habían informado en comisión a los grupos municipales de la oposición en el consistorio almazorense.

Las mismas fuentes también aseguraron que la dirección de obra que ostentan los técnicos municipales «no acepta, y ya se le ha hecho saber a la compañía, ningún cambio que suponga retrasos en la ejecución». Desde el equipo de gobierno, formado por Compromís y PSOE, negaron tajantemente que la última exigencia de la mercantil «suponga la paralización de los trabajos», concretaron. La obra comenzó el pasado julio y tiene un plazo de ejecución de 18 meses.

«BLOQUEO» / Estas declaraciones consistoriales eran una réplica al Partido Popular (PP), que ayer remitió un comunicado en el que hablaba de «bloqueo» en las tareas y en el que aseguraba que la petición del encarecimiento del presupuesto por parte de la firma, tal y como se les informó «en el seno de la comisión informativa, impide fijar una fecha para finalizar la reforma del pabellón B del polideportivo la Garrofera». Una instalación necesaria para los clubs deportivos.

Desde el PP recordaron que el 27 de marzo del 2015 este partido licitó la obra por un importe de 6.929.490,11 euros. «El 21 de diciembre de ese año, PSPV y Compromís en la Generalitat adjudicaron el proyecto por 5.169.399,62 euros, lo que comportaba una baja de 1.760.090,49 euros», apuntaron. «Ambas formaciones deben de ser exigentes con el Consell. Deben reclamar la resolución de esta demanda cuanto antes puesto que, si bien ya está afectando a la reforma del pabellón B, como confirmaron ellos mismos, no debería generar retrasos en la ejecución del esperado centro educativo».

Declaraciones ante las que el equipo de gobierno manifestó: «Sorprende que el PP pida que las obras no sufran problemas cuando el mayor retraso, 10 años concretamente, fue el que creó su partido durante su etapa en la Conselleria y el Ayuntamiento». «El equipo de gobierno felicita a los populares de que, por fin, sean exigentes con la Generalitat, pues en una década y un sinfín de consellers no lo fueron», destacaron. Y añadieron que «los dos ayuntamientos a los que se refiere han iniciado una obra que su único consistorio no empezó».

La conclusión de estos reivindicados trabajos permitirá ejecutar las nueve unidades de Infantil, 18 aulas de Primaria y un comedor escolar que conformarán las instalaciones definitivas del colegio Regina Violant. El proyecto fue finalmente diseñado por los propios técnicos municipales con el fin de tratar de acelerar al máximo los trámites que permitieran dar fin a la larga la etapa de instalaciones provisionales.