Después de 13 años de servicio en el restaurante bar de la ermita, Alfredo Barberá ha anunciado que se despide como ermitaño tras asegurar que no puede optar a volver a presentarse con las nuevas condiciones impuestas por el Ayuntamiento de Vinaròs.

“Han pasado 13 años de servicio al pueblo como ermitaño gestionando el bar de la ermita con alegría, esfuerzo y dedicación”, señala en un comunicado de despedida en Facebook que se ha hecho viral en las redes sociales.

El propietario acusa al actual equipo de gobierno de haber impuesto unas nuevas condiciones “tan elevadas” que han propiciado que nadie opte a la adjudicación del servicio. Un incremento anual que cifran en “20.000 euros de gastos más la licitación, que hacen inviable este negocio”.

“Aun así siguen sin querer modificar las nuevas condiciones”, lamentan, preguntándose “qué estudio de viabilidad se ha hecho”.

El alcalde, Enric Pla, ha manifestado que la nueva concesión se hará por el procedimiento de invitación a interesados tras del fracaso del concurso público.

Apoyo vecinal // El apoyo al ermitaño es tal que los vecinos de Vinaròs se han movilizado por las redes sociales para convocar una concentración en su apoyo el 18 de septiembre, un día antes de que expire su contrato. H