La carretera CV-14 que une Morella y Sorita presenta un intenso tráfico diariamente. A esta circulación tan densa se suman dos factores que han puesto en alarma a los alcaldes de Els Ports: el mal estado del vial en algunos puntos y la gran velocidad a la que transitan numerosos camiones que, por desgracia, protagonizan numerosos accidentes, sobre todo cuando la calzada está mojada por humedad o lluvia. En concreto, el último de los siniestros se produjo la semana pasada.

Muchos de estos vehículos pesados proceden de las minas de tierra de Teruel y tienen como destino las fábricas de azulejos castellonenses. Y viceversa. Al doble trayecto de los tráileres se suma el tráfico normal de la comarca. Los usuarios ya han trasladado a los alcaldes «el miedo que se siente al pasar y ver a la velocidad que circulan los camiones».

En este mismo sentido se manifiesta uno de los primeros ediles de la zona de la ribera del Bergantes, el de Sorita, Manuel Milián, quien apunta que «el problema es más que evidente y requiere de medidas para solucionarlo. En la parte próxima a nuestro pueblo no hay mes que no haya algún accidente, salidas de la carretera o vuelcos. Trasladamos la situación a las autoridades porque son ellas las que pueden poner las medidas para subsanarla».

TESTIMONIOS // Los afectados que pasan regularmente por el vial lidian con circunstancias complicadas. El chófer Francisco Ortí señala que «en los últimos años han empeorado muchísimo las condiciones por los camiones de las minas y el mal estado del firme. A ellos se suma la gran velocidad y, si llueve, es una pista de patinaje, es muy peligroso». Ortí se muestra indignado ante esta realidad. «De Morella a Sorita, por la mañana, pueden adelantarme más de 11 vehículos pesados. Si se quieren matar que se maten, a mí que me dejen tranquilo», apunta.

Esther Folch, monitora del transporte escolar, señala que «las empresas ponen a los chóferes unos objetivos desproporcionados. El problema lo veo en eso, porque los que conducen se ganan el sueldo. Eso sí, poniendo en peligro su vida y la del resto». En el autobús, con 50 menores, cuando ves que salen de una curva corriendo da miedo, sabes que si no corrigen el trazado podría pasar algo grave», añade.

PIDEN CONTROLES AL SUBDELEGADO. Alcaldes de Els Ports reclamaron en Portell soluciones al problema de la CV-14, tras una reunión de seguridad con agentes de la Guardia Civil y con el subdelegado del Gobierno, David Barelles. En el encuentro, trasladaron la situación y, como relata Álvaro Ferrer, munícipe anfitrión, «pusimos en conocimiento de los agentes y del Ejecutivo central el malestar que muchos vecinos nos habían hecho llegar. Además, somos conocedores de los múltiples accidentes que han ocurrido en los últimos años, que tienen por causa la velocidad a la que circulan por esta carretera».

El remedio a las infracciones levanta polémica. Algunos argumentan que la medida más idónea pasa por poner radares fijos o móviles. Otros refutan estas propuestas argumentando que los camioneros se avisan entre ellos de la presencia de controles. Una de las acciones más aplaudidas por todos es establecer revisiones del tacógrafo para asegurar una disminución de la velocidad.