Benicarló entra en el mes fallero por excelencia y lo hace por la puerta grande, con un fin de semana plagado de actos. Ayer, tuvo lugar la multitudinaria cridà desde el ayuntamiento. Una cita donde la algarabía, la música de las charangas y el olor a pólvora toman la calle. Quien la vivieron más intensamente fueron las fallera mayores, Ingrid Vizcarro y Paula Gilabert, que arropadas por sus cortes de honor se convirtieron en las protagonistas. Junto a ellas, el alcalde, Marcelino Domingo, trasladó sus deseos a los vecinos de que las Fallas sean una muestra de la hospitalidad, diversión y comportamiento cívico. Con el estallido del cohete, el bullicio y la jarana retornaron de nuevo a la plaza, mientras un buen número de mujeres se ponían en marcha y formaban un animado pasacalle.

De hecho, la cena de mujeres se ha convertido ya en un clásico de las Fallas después de 28 años. La idea partió de la comisión femenina de la Falla Mercat Vell, encabezada por Clara Arnau, y fue a partir de 2002 cuando logró consolidarse reuniendo a varios cientos de mujeres. Hace pocos años la cifra superó las 625, sin embargo, este año, la crisis también hizo mella y fueron 200 féminas. Aun así no decayó ni el buen ambiente ni el espectáculo.

El artista del Grao de Castellón Juanra Castillo triunfó transformándose en una auténtica reina de la copla, junto al triunfito Xavier Dealbert, de Vinaròs, y Antonio Ruiz, todo un maestro versionando a Sabina y compañía. Tampoco faltó el toque picante, con la intervención del un boy, que consiguió subir la temperatura del ambiente en la sala.

SORPRESA FINAL // Pero la sorpresa de la noche vino de la mano de Clara Arnau, que se animó a interpretar junto a Juanra Castillo la popular canción Las cosas del querer, conquistando en su debut a las allí reunidas y al personal del restaurante. Su osadía fue premiada con una cerrada ovación. Ha nacido una estrella. H