Las obras de instalación de las farolas de la carretera del puerto de Burriana arrancarán la próxima semana. De momento, eso esperan. El proyecto se licitó y adjudicó a finales del pasado año e incluso cuenta con el plan de seguridad y el acta de replanteo firmados. Además, la empresa ha realizado el acopio de material para proceder al inicio de las tareas.

Lo único que resta para que los trabajos sean una realidad es oficializar el trámite de comienzo, algo que prevén que ocurra esta misma semana, cara a que la próxima ya se vean las máquinas interviniendo en este vial. El plazo de ejecución es de unos tres meses, pero pretenden que, salvo imprevistos, la carretera esté lista antes de Pascua.

RETRASOS // La remodelación se adjudicó provisionalmente a mediados de noviembre, pero ha acumulado retrasos. La iluminación del carril ciclopeatonal no estaba contemplada en el planteamiento inicial y, de ahí, que no se acometieran esas acciones al mismo tiempo que se actuaba en la carretera del puerto.

Tras la instalación del riego por goteo a la vegetación, que separa la plataforma de circulación de vehículos y la destinada a los peatones, ahora resta por colocar las farolas y, con ello, se dará por terminada una actuación sufragada a partes desiguales por la Generalitat y el Ayuntamiento.

Tras los cálculos luminotécnicos, se decidió que los puntos de luz se ubicaran a una interdistancia de 27 metros, con un total de 59 farolas de ocho metros de altura y de doble brazo para iluminar el vial destinado a los vehículos y la zona ciclopeatonal. Pondrán, por ello nuevas arquetas y deberán construir los anclajes. También se incluye una mejora del alumbrado público del principio del camino Hondo con la instalación de tres puntos de luz.