Un vecino de Vilafranca, Jesús Tena Gracia, fue juzgado ayer en Vinaròs por desobedecer la ley electoral y negarse a participar como primer vocal en las pasadas elecciones. Por la mañana, antes de la celebración de la vista, hubo una concentración en su apoyo de una docena de personas a las puertas de las instalaciones judiciales, con dos pancartas que dictaban «por la libertad individual e ideológica» y «por el derecho a la objeción de conciencia».

El juicio quedó visto para sentencia y, aunque en un principio se indicó que se enfrentaba a una multa de 5.500 euros, antes de la celebración de la vista se intentó llegar a un acuerdo económico de una sanción de 700 euros que el acusado no quiso aceptar. «Dependiendo del resultado de la sentencia, si me declaran culpable, recurriré, porque quiero que se escuchen mis argumentos», explicó Tena al salir del juzgado.

El joven recibió el 1 de junio una notificación en la que se le informaba de que formaba parte de la mesa electoral del colegio público de Vilafranca, teniendo que comparecer el 26 de junio, con motivo de las elecciones generales, para la constitución de la mesa y permanecer en ella hasta finalizar el proceso. «Envié mi alegación comunicando mi objeción de conciencia y expliqué que por razones ideológicas no podía participar en la mesa electoral y que revocaran mi nombramiento como primer vocal», afirmó. La junta denegó la solicitud.

Se declara «insumiso» y defiende que no cree «en el principio de autoridad en las relaciones humanas». «Por esta razón, nunca he votado», concluye.