La junta de gobierno local del Ayuntamiento de l’Alcora ha aprobado las bases del plan de empleo social del 2017. Un programa para el que, como destaca la concejala de Empleo, Nuria Sánchez, «se ha incrementado el presupuesto en casi un 20%, llegando este año a los 197.000 euros».

La finalidad es llevar a cabo contratos de trabajo entre personas con riesgo de exclusión para la realización de tareas que afectan a servicios públicos esenciales o la ejecución de obras.

Concretamente, el consistorio prevé la contratación de 40 personas a través de cuatro brigadas de ocupación --una más que el ejercicio pasado-- que se sucederán a lo largo del 2017. Cada una de ellas estará integrada por un total de 10 trabajadores y desarrollarán diferentes proyectos necesarios para el municipio.

La responsable de este departamento explica que «se mantienen las mejoras introducidas en el 2016, entre ellas, la inclusión de una parte formativa, con el objetivo de mejorar sus condiciones de empleabilidad». De esta manera, «el primer mes se combinarán las clases teóricas y el trabajo».

LOS BENEFICIARIOS / El programa está dirigido a personas desempleadas de larga duración en situación de vulnerabilidad social y laboral. «Tendrán preferencia los alcorinos parados pertenecientes a familias que no tengan ingresos», resalta Sánchez.

La selección se realizará mediante la presentación al Servef de las correspondientes ofertas de empleo y, posteriormente, entre los candidatos remitidos por este organismo la comisión de valoración procederá a baremar toda la documentación presentada de acuerdo con los criterios que se establecen en las bases.

LOS MÁS VETERANOS / Para efectuar la preselección, se priorizará a todos aquellos ciudadanos inscritos como demandantes de empleo con más periodo de antigüedad en el centro Servef.

Los aspirantes que reuniendo todos los requisitos no hubiesen sido contratados, quedarán incluidos en bolsa de trabajo por orden de puntuación durante el plazo de vigencia del plan de empleo social de este año.