Mas de 7.000 personas celebraron ayer la Festa del Rotllo de l’Alcora, demostrando un año más que es, sin duda, una de las tradiciones más multitudinarias y populares dentro de la Pascua en el municipio.

La celebración, que desde el 2009 es de interés turístico provincial, se inició a las 9.00 horas con la romería. El sonido de la dolçaina y el tabal, junto al vuelo de campanas, acompañaron la salida de los asistentes desde la plaza de la Iglesia hacia la ermita de San Cristóbal, acompañando al clero y a la Rondalla l’Alcalatén.

A la llegada de la comitiva, tuvo lugar la tradicional misa en el templo, a la que siguió el almuerzo por los pinares con la típica mona de Pascua. Tampoco faltaron juegos y actividades para los niños organizadas por el Ayuntamiento y la visita a las tradicionales paradetes, que completan la estancia en la montaña.

8.000 ROLLOS // A mediodía, en la puerta del Calvario, las autoridades, reina, damas, la banda de música, así como numerosos padres con sus hijos vestidos de angelitos, algunos con apenas dos meses de vida, esperaron la llegada de los romeros para acompañarles hasta la parroquia, donde se procedió al reparto de los 8.000 rollos elaborados este año para este evento festivo.

El alcalde, Víctor Garcia, manifestó que «esta fiesta está muy arraigada en el sentimiento popular y cada año congrega a multitud de personas que acuden a participar en la Romeria d’Infants, considerada la única de toda España en la que los protagonistas son los niños, y para el posterior reparto de los rollos en la ermita a los asistentes».

El munícipe alcorino agradeció a los vecinos y visitantes su participación, «que es la que engrandece la celebración, así como a colectivos y asociaciones, como las bolilleras que prepararon días atrás las 5.000 cintas, rollets y pulseras repartidas antes del inicio de la romería», concretó.