Moncofa estrenará este verano su primera playa nudista y con ella reforzará su cara “más liberal y sin prejuicios”. De esta forma el municipio será, de nuevo, un referente en la provincia por su tolerancia y libertad. Muestra de ello es la fiesta del orgullo gay, que celebra desde hace dos años y que el pasado año atrajo a más de 4.000 visitantes.

El alcalde de la localidad, Jaime Picher, confirmó que los trámites para su puesta a punto están “muy adelantados” y aunque el consistorio no ha recibido todavía la autorización, el munícipe espera que “de aquí a junio esté todo solventado”, de forma que en verano esté operativa esta primera zona nudista moncofense.

La iniciativa, que en su día partió del concejal nacionalista Josep Canós, que gobernaba con el PSOE, se presentó como moción en el pleno de febrero del 2013 y obtuvo el respaldo para que una parte del Belcaire se habilitara para poder ir sin bañador.

Después de más de un año de trámites diversos con la delegación provincial de Costas, la Subdelegación del Gobierno y la Conselleria, “nos encontramos ya solo a expensas de solicitar las señalizaciones correspondientes a la administración autonómica”, añadió el primer edil.

El área del litoral moncofense, donde los amantes del naturismo podrán disfrutar de la libertad que supone para ellos tomar baños de agua y de sol directamente sobre la piel, abarca un tramo de unos 300 metros, desde el límite sur hasta el camino Cabras. Se trata de un lugar que está separado de las viviendas. El consistorio no ha previsto que se lleve a cabo ningún tipo de acotamiento para uso exclusivo de este colectivo, de forma que podrá tener acceso a él cualquier persona que no practique esta modalidad de baño.

INVERSIÓN MÍNIMA // Las previsiones que en su día llevó a cabo el consistorio, tras obtener el sí de la corporación a esta propuesta, eran que la inversión en esta primera playa nudista fuera mínima; es decir, tan solo harán un desembolso correspondiente a la colocación de unos carteles en las inmediaciones informando de la modalidad de baño del lugar.

Debido a que en el litoral castellonenses únicamente hay una playa de este tipo, en el término de Orpesa, la iniciativa “puede convertirse en un reclamo turístico más” para el municipio, como argumentó en su día el concejal Canós, y aportará un tipo de visitante diferente hasta el momento que, a todas luces, dejaría una huella en la economía local.

La propuesta de instaurar en la playa esta zona reservada para esta modalidad de baño llegó hasta el Ayuntamiento a través de la asociación nudista Camp del Morvedre, de Sagunto, y fue asumida rápidamente. H