El alcalde de Morella, Rhamsés Ripollés, y la edila de Bienestar Social, Malú Blasco, se han reunido con la dirección de la residencia Sant Joan Baptista, tras percatarse que con los presupuestos de la Generalitat del 2015 se generaría un déficit para el centro de 500.000 euros. Y es que se ha presupuestado la misma cantidad que en el 2014 y no se ha tenido en cuenta la aportación de los usuarios que, a partir del 1 de enero, cobrará la administración autonómica. La consignación es de 800.000 euros en vez de 1,3 millones. Ripollés exige que se solucione inmediatamente. RD