La Unidad Militar de Emergencias (UME) organizó un espectacular simulacro de incendio forestal en Morella, que se convirtió en un laboratorio para la batalla contra el fuego y que contó con más de 550 efectivos, 200 vehículos y seis aeronaves.

El operativo constituyó la mayor prueba de este tipo que se ha hecho en la provincia. Bajo la organización de la UME, participaron efectivos de la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a las Emergencias, Bomberos Forestales de la Generalitat, Agentes de Medio Ambiente, el Consorcio de Bomberos de Castellón, la Guardia Civil, la Policía Local de Morella y la Cruz Roja, Subdelegación del Gobierno y las empresas Maestrazgo Distribución Eléctrica y Renomar, junto a vecinos voluntarios.

Las prácticas recrearon un fuego en Els Ports que afectaba a los municipios de Morella y Xiva. Representó una situación 2 del plan de incendios forestales de la Comunitat. Entre las acciones, no faltaron la respuesta ante una afección en una línea de alta tensión, el avance de las llamas hacia un núcleo habitado y la evacuación de los vecinos de la localidad amenazada. De este modo, pudieron poner a prueba los organismos intervinientes.

MÁS PREPARADOS

El alcalde de Morella, Rhamsés Ripollés, manifestó que «es importante realizar estos simulacros y que se pueda prevenir la posibilidad de que haya incendios». El director de la Agencia de Seguridad y Respuesta a las Emergencias, José María Ángel, apuntó que estas acciones sirven «para que se tome conciencia y se lleven a cabo medidas de autoprotección». Por su parte, el diputado de Bomberos, Luis Rubio, afirmó que permitirán que los «profesionales estén más formados que nunca», mientras el delegado del Gobierno en Castellón, Juan Carlos Moragues, destacó «la excelente preparación de la UME, la entrega y el trabajo del personal», concretó.