El Ayuntamiento de Sant Joan de Moró ha liquidado sus cuentas del año 2016 con un balance «altamente positivo», según asegura el alcalde de la localidad, Vicente Pallarés. El remanente suma más de 2,4 millones de euros, unas cifras que arrojan un superávit de más de 330.000 euros.

El primer edil subraya que «a pesar de la intensa política inversora que se desarrolló el año pasado, tanto en infraestructuras como a nivel social, la deuda actual es cero» y todavía disponen «de un importante remanente de tesorería». Unos resultados que, según el munícipe, se han conseguido por «una gestión eficiente y controlada», puntualiza.