El Ayuntamiento de Benicàssim está trabajando ya en la modificación del reglamento orgánico municipal (ROM), tras haberse quedado anticuado con la normativa actual y al ser una reivindicación de todos los grupos políticos. El pleno extraordinario de ayer aprobó, por unanimidad, una enmienda presentada por el PP que ampliaba la iniciativa de la propuesta de ARB de cambiar el artículo 101 a la revisión completa del conjunto del reglamento. “Por estar desfasado el texto --que es del 2001-- es necesario renovarlo y modernizarlo”, explicó la alcaldesa, Susana Marqués.

El equipo de gobierno creará “una mesa técnica, jurídica y política de trabajo que busque el consenso del conjunto”. Una de las primeras cuestiones a tratar será la presentación y determinación de las mociones, según indicó la primera edila, al ser el asunto que más problemática está suscitando durante las últimas sesiones plenarias. Y es que existen discrepancias, por parte de los grupos de la oposición, en el procedimiento de consideración de las propuestas como mociones. Lo que, precisamente, motivó a los partidos minoritarios a solicitar este pleno extraordinario en el que se incluyeron en total cuatro puntos en el orden del día.

Otro de los temas a tratar será el plazo de presentación de las enmiendas, que se propone que sea con mayor antelación “para que los grupos puedan estudiarlas con tiempo suficiente y se puedan pedir los correspondientes informes en los casos necesarios”. Marqués defendió que el consistorio ya tiene un borrador de la modificación del reglamento y que se retomará con la incorporación de la secretaria. H