La ordenanza reguladora de las fiestas sobre la que está trabajando el Ayuntamiento de la Vall d’Uixó no entrará en vigor en la temporada que está a punto de iniciarse. Al menos, eso se desprende de las declaraciones del concejal del área, Lluís Diago, que ha asegurado a Mediterráneo que su actual prioridad es «conseguir el máximo consenso posible, tanto con las comisiones de fiestas, como con las asociaciones de vecinos».

De hecho, tras reunirse con la federación de comisiones festivas, Diago ya ha planificado un encuentro con las AAVV y la Comisión de Accesibilidad, a las que invita a hacer sugerencias a una normativa «que no está pensada como elemento sancionador, sino como una herramienta más para facilitar la organización de cualquier acto público».

Porque, aunque cuando se habla de regular las fiestas, el primer pensamiento siempre se dirige a los bous al carrer, lo cierto es que la nueva ordenanza también será de aplicación en diversidad de celebraciones como carreras, pasacalles y ferias, es decir, cualquier convocatoria que pueda interferir en el normal desarrollo de la vida cotidiana de la ciudad, con el corte de calles o situaciones similares. Diago asegura que los aspectos que se recogerán en la norma «son de sentido común, que, en ocasiones, no se cumplen no por falta de voluntad sino por desconocimiento».