El conseller de Educación, Vicent Marzà, recibirá 574 cartas, una por cada alumno del colegio Regina Violant de Almassora, después de incumplir el compromiso de adjudicar el nuevo centro educativo en el mes de septiembre. Esta es una de las acciones que acordó la Asociación de Madres y Padres (AMPA) del Regina Violant en la asamblea general de socios celebrada la semana pasada.

En las misivas se exigirá al máximo representante de Educación en el Gobierno valenciano “el cumplimiento del compromiso adquirido por su Conselleria para la adjudicación inmediata e inicio de las obras del colegio Regina Violant, sin más retrasos injustificados”, señalaron fuentes de la asociación. Marzà confirmó personalmente a los padres la adjudicación en septiembre, en una visita realizada un mes antes a las instalaciones provisionales del centro --levantadas durante 10 años en barracones--. Sin embargo, se ha producido un nuevo retraso respecto a dicha fecha que, además, confirmó la concejala de Educación, María José Tormo, también presente durante la asamblea de padres.

En este sentido, Tormo explicó a los presentes que la mesa técnica está cerrada y que la económica se realizará el próximo mes de noviembre. “Nos indicó que la única fecha fijada era la del 11 de enero del 2016 para la firma de contrato de adjudicación, con lo que la hoja de ruta de Conselleria sería el inicio de las obras para marzo o abril del próximo año”.

RETOMAN LAS PROTESTAS // El presidente de la AMPA, José Antonio Rivera, explicó que durante la reunión también se aprobó retomar las movilizaciones que tuvieron lugar el pasado curso y en las que, curiosamente, también participó el conseller como representante de Compromís en aquel momento. Comenzarán el viernes 16, a las 16.45 horas en la puerta del centro. Y reclaman a la concejala de Educación una reunión “urgente” con el conseller y el secretario autonómico “para que informe en primera persona de las causas de los retrasos”. H