Exultante y entusiasmada, Paula Requena asumió ayer su proclamación como fallera mayor de la Falla Els Cremats de Benicarló. La flamante reina recibió el traspaso de poderes de mano de su antecesora en el cargo, la peñiscolana Rocío Bonich, que le impuso la banda acreditativa y fue la primera en felicitarle.

Previamente, su homóloga infantil, Leire Caldés Palomo, junto a su hermano, Marc, centraron su particular parcela de protagonismo al ser elegidos máximos representantes de los falleritos y falleritas de la entidad que preside Bartolomé Caldés Escuder.

Un trío de bellas damas ostentan el madrinazgo. Así, María Rico es la padrina de la falla; Paula Vizcarro, es la de l’Estendard y Andrea Requena ejerce de representante del Foc. El cuadro de honor lo completan el presidente honorífico, Óscar Medinilla; y, como mantenedor, la comisión escogió a una de las personas más estrechamente vinculadas con la falla y que mejor conoce su historia, como es Héctor Palomo.

Palomo es uno de los fundadores (hace casi un cuarto de siglo) de la entidad y durante nueve años ejerció de máximo responsable de la misma. Sus experiencias y vivencias en los 24 años que ha formado parte del colectivo josefino le sirvieron para hilar un emotivo discurso.

Por su parte, Josep Salom condujo el acto de exaltación que se celebró en el auditorio Pedro Mercader de Benicarló.