Burriana podría repetir la lidia de un toro por la tarde y por la noche por primera vez en las últimas cuatro décadas. En 1976 se instauró la norma no escrita y ya convertida en tradición de que el astado que se soltaba por la tarde acababa en el matadero y por la noche se soltaba otro. Pero eso va a cambiar en las fiestas patronales de la Misericòrdia.

El motivo es que las peñas no quieren patrocinar ningún toro embolado y ante la ausencia de astados para las noches, la única solución es que algunos de los ejemplares exhibidos previamente estén menos tiempo en la plaza y se guarden para la prueba nocturna. Esa es una opción que, en principio, aceptan dos de las nueve peñas que patrocinarán bravos. La Federació de Bous de Burriana ya ha trasladado la propuesta a la edil de Fiestas y está a expensas del visto bueno.

Este año los toros son hasta un 40% más caros que en campañas anteriores y, además, hay menos ejemplares de los que se adquirían para embolar, pues son animales con algún defecto, bien por cuestión de edad o por algún problema en los cuernos. De ahí que las peñas se hayan decantado por adquirir toros con estampas espectaculares y hierros de reconocido prestigio, y quieren que se lidien en puntas y no con bolas.

Desde la Federació de Bous de Burriana, José Torralba apuntó que están “dispuestos a colaborar en lo que se pueda con el Ayuntamiento”. De hecho, ya le han “indicado la problemática que hay para este año”, aunque por delante está la constitución de la Comisión del Toro y que desde el consistorio se comiencen a tomar decisiones al respecto, algo que no sucederá hasta la próxima semana, puntualizan.

Queda por conocer cuántos animales patrocinará el Ayuntamiento de Burriana, que habitualmente costeaba cinco astados. La media de los últimos cinco años se había situado en 17 toros, con las excepciones del 2012 y 2013, cuando fueron 20 ejemplares, merced a que había más peñas que los sufragaban. H