El servicio de socorrismo de playas de Peñíscola, que gestiona la compañía Saepla, ha superado la cifra de 2.000 asistencias en la presente temporada. Esta cifra incluye todo tipo de atenciones, desde el rescate de personas que corren el riesgo de ahogarse en la playa hasta casos de niños que requieren de una pequeña cura por picaduras de avispas.

Solo en el mes de julio, las incidencias fueron de 1.200, en los puestos de atención repartidos por la playa Norte y playa Sur, que funcionan desde las 10.00 horas hasta las 19.00 horas.

A estas cifras hay que añadir los datos correspondientes a los baños asistidos realizados en el punto de playa accesible, que en julio fueron de 450. La buena aceptación del servicio ha hecho plantearse al consistorio una ampliación de la superficie del actual punto adaptado, o bien la puesta en marcha de otro nuevo punto en un tramo distinto de la costa.

CONCIENCIACIÓN // Uno de los días más complicados del presente verano fue el miércoles 19. Las fuertes corrientes de agua y la escasa concienciación de algunos bañistas, que no obedecieron a las indicaciones de la bandera roja, obligaron a realizar 14 rescates en una sola tarde, de los cuales dos requirieron de traslado al hospital, debido a la excesiva ingesta de agua de mar. Desde la compañía recuerdan “la necesidad de obedecer las indicaciones de las banderas, ya que hay personas que creen que el mar está tranquilo, cuando en realidad hay corrientes de agua, que en puntos como el castillo pueden ser peligrosas”. Ese día, los socorristas tuvieron que ampliar el horario hasta casi las 21.00 horas en prevención ante posibles rescates. Algo que también supuso arriesgar sus propias vidas ante las malas condiciones del mar. H