Policía Autonómica y Seprona controlarán a partir de este viernes que la planta de Reyval de l’Alcora cumpla con la paralización de la actividad de entrada de residuos, en cumplimiento con la resolución de la ejecución de la sentencia del Tribunal Supremo (TS) notificada por la Conselleria de Medio Ambiente a la empresa el pasado 3 de mayo.
La medida es consecuencia del fallo del Alto Tribunal, que desestimó el recurso de casación interpuesto por la mercantil contra la resolución del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) que anulaba la autorización ambiental integrada otorgada a la firma, que le permitía desarrollar su actividad. «Desde el Consell estaremos encima para garantizar el cumplimiento de las instrucciones y que se hace el seguimiento adecuado para ello», confirmó a este periódico el secretario autonómico de Medio Ambiente, Julià Álvaro.
De hecho, se trata de una de las reivindicaciones del equipo de gobierno alcorino, así como del PP de la capital de l’Alcalatén, que reclaman a la Generalitat que «lleve a cabo un control riguroso y exhaustivo de todos los residuos almacenados, así como de la correcta gestión de los mismos fuera de la planta». El ejecutivo que encabeza Víctor Garcia, por su parte, confirmó que la vigilancia contará con la colaboración de la Policía Local y de la oficina municipal de Medio Ambiente.
¿Dónde irán las basuras que se encuentran en el interior de la planta de l’Alcora a partir del viernes y hasta el cese de la actividad? Esta es la pregunta clave. La compañía deberá justificar la retirada y entrega a un gestor autorizado para que los traslade a las instalaciones que corresponda en función de su estado, ya sea a una planta de inertización o al vertedero que sea oportuno.
ANÁLISIS
Asimismo, para garantizar que todo el procedimiento se lleve a cabo de forma correcta, a los tres meses, el departamento autonómico que encabeza Elena Cebrián realizará un control con el objetivo de evaluar el estado del suelo y de las aguas subterráneas de la zona en la que se encuentra la planta de Reyval.
Por otra parte, la Conselleria de Sanidad ultima los trámites para que a partir del sábado los residuos sanitarios de la Comunitat se trasladen a las instalaciones de otra empresa para su tratamiento. Hasta ahora iban a Reyval, ya que la compañía ganó la licitación en el 2013, pero a partir del viernes no entrarán desechos de este tipo y el día 23 la firma debe estar vacía.
La polémica se arrastra desde hace más de un lustro, cuando la compañía quiso construir una incineradora en l’Alcora, y concluye con la ratificación del fallo que anula la autorización ambiental de la actividad. En este tiempo los vecinos, encabezados por el Ayuntamiento y con el apoyo de la Plataforma Ciutadana No a la Contaminació, han protestado en numerosas ocasiones contra el citado proyecto.
