El refugio antiaéreo del Camí d’Onda de Burriana se construyó para una capacidad de aproximadamente medio millar de personas. Así lo apunto el director del proyecto, Iván Cabrera. El arquitecto indicó que, por lo que se ha escapado y recuperado en los últimos dos años de trabajo, ya hay capacidad para unas 200 personas, «pero por lo que nos ha dicho la gente que conoció el refugio, porque eran niños durante la posguerra y jugaron en las galerías subterráneas, cabían hasta 500». Cabrera apuntó que la forma de construcción del refugio responde al manual que repartió la República en el año 1937, por lo que el refugio tiene galerías de hasta 12 metros de profundidad que era la que consideraban segura para las bombas que lanzaban los aviones italianos.
