La falla La Paperina cerró ayer el ciclo de exaltaciones de Benicarló en el auditorio municipal Pedro Mercader, engalanado para la ocasión. La exultante Tamara Molina Quevedo, que lució un elegante vestido tradicional en tonos turquesa pastel, con ricos y coloridos bordados, fue proclamada fallera mayor de la entidad que preside Alejandro Genovés.

Embargada por la emoción, la joven, dotada de una serena y natural belleza, asumió el cargo con ilusión y alegría; sentimientos que comparte con su homóloga infantil, Ainoa Serrat Guimerá, elegida máxima representante de la cantera de La Paperina.

La pequeña Ainoa estará acompañada en el desempeño de su función por Cristian Jiménez Guimerá, que ostenta el cargo de presidente infantil.

El madrinazgo recayó en dos elegantes damas: Sonia González Mampel, nombrada padrina de la falla, y Susana Pérez Alonso, que ejercerá de padrina del Foc.

MANTENEDOR // Miguel Fatsini ejerció de brillante mantenedor. En su discurso, muy aplaudido, recordó los acontecimientos y anécdotas que han jalonado la historia de la falla, y también dedicó palabras de afecto y reconocimiento a los flamantes cargos.

Por otra parte, Sara López y Santiago Romero actuaron como maestros de ceremonias del evento, que puso el broche de oro a los poco más de dos meses en los que, cada fin de semana, se han presentado las falleras mayores y los cuadros de honor de las trece comisiones del municipio.

A partir de ahora, comienza la cuenta atrás para el inicio de las fallas. De hecho, el próximo sábado tendrá lugar la Crida, el multitudinario acto que inaugura oficialmente las fiestas josefinas.