Vilafranca se colapsó ayer durante dos horas con una espectacular tormenta de agua y granizo. Se recogieron en pocas horas 75,5 litros por metro cuadrado.

Poco antes de las 16.00 horas, la precipitación comenzó a descargar con fuerza. Se mezclaron agua y granizo, que no fue de grandes dimensiones, y en varios puntos se acumularon más de 10 centímetros de piedra, bloqueando en parte el alcantarillado.

Algunas viviendas y locales, como la Casa de Cultura, se inundaron y tuvieron que intervenir los bomberos voluntarios del parque del Alt Maestrat para achicar agua. Tras el episodio, los vecinos tuvieron que ayudar a algún vehículo que se quedó bloqueado. También tuvo que salir una máquina excavadora a limpiar las avenidas principales de acceso a la localidad y otras calles.

A todo ello se sumó un corte del suministro eléctrico en toda la localidad que se alargó entre las 16.00 y las 18.00, aproximadamente, que frenó la actividad en las industrias de la zona.

Un episodio que se sumó al vivido el miércoles, en el que un rayo partió un chopo en la carretera CV-15, acumulando más de 100 litros por m2 en dos días. H