La localidad de Eslida cumplió las expectativas y celebró ayer su XXIV Mostra de Productes Artesanals d’Eslida i de la Serra d’Espadà con una gran participación. A lo largo de la jornada fueron muchas las personas del propio municipio y otros lugares de la Plana Baixa los que conocieron la oferta de los más de 30 expositores.
El evento turístico, impulsado desde el Ayuntamiento, supone una cita obligada, tanto para los comerciantes adheridos como para los propios turistas, interesados en conocer toda la actividad artesanal de la zona. Además, hubo asistencia de asociaciones y entidades. El alcalde, Rafael Sorribes, junto a miembros de la corporación y el diputado provincial Salvador Aguilella, fue el encargado de inaugurar este certamen, acompañados por la música de dolçainers y tabalaters.
De toda la gama de productos mostrados, la gran estrella fue el corcho. Los visitantes pudieron comprobar su proceso de fabricación, así como adquirir todo tipo de elaboraciones realizadas en este producto autóctono y tan preciado. También estuvo a la venta una amplia oferta, como miel y sus complementos, además de dulces y pan del propio pueblo.
El primer edil destaca que para Eslida, «esta muestra sigue siendo el buque insignia del turismo, porque si bien es mucho el esfuerzo que año tras año se hace desde el propio consistorio para poder mantener esta cita, también representa un aliciente más para todas las personas que están pasando sus días de vacaciones en esta localidad y en muchos destinos colindantes», argumenta.
VERANO / Durante los meses de julio y agosto la población aumenta de manera considerable su número de habitantes. Por este motivo, el consistorio se implica para poder ofrecer a los veraneantes y personas que están pasando sus días de descanso en las inmediaciones una importante programación que en el transcurso de agosto se traduce en esta feria, y en las fiestas del Cristo, que se llevarán a cabo en la tercera semana de este mes.
