El Ayuntamiento de Vinaròs ha puesto en manos de sus servicios jurídicos la desaparición --hace varios años-- de valiosa documentación y cuadros que pertenecían al archivo municipal. Una denuncia de expolio de patrimonio documental que ha realizado en varias ocasiones la Associació Cultural Amics de Vinaròs y que puede llegar a los juzgados.
«Hace unos meses, se nos hizo llegar que en una página web había una serie de obras de bronce que llevaban el sello del archivo municipal de Vinaròs. Pasamos el parte al archivero, que nos confirmó que había dos piezas de la misma serie aquí. Sin embargo, en el etiquetaje constaba que deberían existir al menos una docena. Entonces, sospechamos que podían haberlas robado», relató el edil de Cultura, Marc Albella, a preguntas de Mediterráneo.
«Por otro lado, desde la biblioteca se nos informó que había libros en internet que podrían haber formado parte del fondo antiguo de la ciudad», añadió. Y destacó que, «a partir de ese momento, empezamos a solicitar información y lo pusimos en manos de los servicios jurídicos municipales. Añadió que, «ya en anteriores legislaturas, había existido alguna sospecha sobre posibles sustracciones de documentos».
A LA ESPERA
El concejal socialista señaló que el equipo de gobierno está ahora pendiente de este informe para conocer el procedimiento a seguir. «Si nos dicen que hay que denunciarlo, se denunciará; y si hay que requerir la documentación, se requerirá».
El robo se ha tenido que gestar, según consideró Albella, años atrás, «cuando el archivo estaba disgregado entre un almacén y la biblioteca, mientras se gestionaba su traslado y no había un inventario preciso». «Eran sitios donde entraba y salía mucha gente y fue entonces cuando se pudo producir el mayor expolio», subrayó el edil para quien «lo que hay que determinar es si todos estos documentos estaban o no en el consistorio porque, de momento, solo existen sospechas».
Sin embargo, Albella también indicó que, curiosamente, desde que el Ayuntamiento de Vinaròs dio parte a los servicios jurídicos de este asunto, en la casa grande se han recibido ya dos donaciones anónimas de documentación que pertenecía a la ciudad.
«En Vinaròs solo hubo una persona que inventarió de forma manuscrita parte del archivo y ese fue el archivero Juan Bover pero, cuando falleció, no se continuó con ello», señaló el presidente de Amics de Vinaròs, José Luis Pascual, para quien esta falta de un inventario exhaustivo facilitó esta lamentable situación.
De momento, «no hay pruebas fehacientes» del posible autor o autores de este robo patrimonial, y solo se sabe que «hay documentación que llevaba el sello del archivo municipal que ha aparecido en casas de subastas». Alguna ha podido ser recuperada gracias a las gestiones de Amics de Vinaròs, que precisamente esta semana ha realizado una donación de documentos que ha hallado.
