Vinaròs celebró ayer la festividad de su patrona, la Misericòrdia. Aunque el día amaneció nublado, no impidió el normal desarrollo de la jornada, a pesar de que hubo, quizá por la meteorología inestable, menos gente de lo que suele ser habitual en la ermita. A las 7.00 horas, salió la romería desde la iglesia Arciprestal y a la llegada tuvo lugar la tradicional misa para los peregrinos.
Un poco más tarde, se celebró la esperada actuación de los integrantes del grupo folclórico Les Camaraes, que arrancaron los aplausos del público en la plaza de la ermita. Al mediodía, tuvo lugar la misa en honor a la virgen y, al finalizarse, procedió al reparto de la paella, que cocinaron los integrantes de la brigada municipal. En total, se sirvieron 1.900 raciones. Este año, como novedad, el Ayuntamiento decidió repartir gratuitamente los recipientes para el arroz, como medida higiénica y para asegurar que todos tuvieran la misma cantidad.
A las 17.30 horas, se inició la bajada y la posterior procesión por las calles del centro. H
