La Generalitat autoriza al Ayuntamiento de Vinaròs el cambio de la piscina municipal por el carril lúdico a la ermita en el proyecto aún pendiente del plan Confianza. El consistorio solicitó a la Administración autonómica recuperarlo después de haber recibido una sentencia desfavorable del juzgado contencioso administrativo de Castellón que dejaba sin efecto la tramitación de la instalación acuática.

Los ediles Jan Valls (Som Vinaròs), Guillem Alsina (PSPV) y Domènec Fontanet (Compromís) comparecieron ayer para explicar que el Consell destinará 2,3 millones en una vía verde peatonal y ciclista desde el puente romano sobre el río Cervol hasta el entorno del ermitorio de la Misericòrdia. Un programa que contempla la demolición y posterior construcción del Pont Roig, señalado por el Patricova como una infraestructura que, en el caso de fuertes avenidas de agua, desborda el río Cervol y produce inundaciones en la localidad.

CON DETALLE / El proyecto en este punto, que conecta la parte de la ermita de Sant Gregori con la depuradora, consiste en cambiar los cuatro apoyos que tiene actualmente por solo uno central, con lo que se ganará en capacidad de evacuación. El proyecto contempla también las expropiaciones de algunos terrenos y defensas del vial junto al cauce y la ampliación del puente de la ermita y la posible construcción de otro, aunque todavía falta la supervisión de la Conselleria en lo referente a este plan original.

El plazo máximo de ejecución de la intervención, que requerirá de autorizaciones previas de Carreteras así como de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), es el 30 de junio del 2019.

Los ediles reconocen que es también una obra necesaria.