El poblado ibero del Puig de la Misericòrdia de Vinarpos será mucho mejor apreciado por los visitantes. Y es que esta semana han concluido los trabajos de la primera fase del proyecto de instalación de una pasarela de madera que permite un mejor acceso y observación del yacimiento en toda su extensión.

Los concejales de Cultura y Patrimonio, Marc Albella; y el de Medio Ambiente, Jordi Moliner, visitaron ayer estos trabajos, que se ha encargado de acometer la Diputación de Castellón, en colaboración con el Ayuntamiento, tras la última campaña de excavaciones, y en los que se han invertido más de 40.000 euros.

Moliner indicó que en los próximos meses el consistorio procederá a la retirada de los restos de la base antigua sobre la que se asentaba la Cruz que estaba encima del poblado.

Este verano, antes de que se lleve a cabo una nueva campaña de exploraciones, la zona debe estar despejada para que pueda llevarse a cabo una segunda fase de instalación de esta pasarela, que contará con una plataforma mirador desde donde podrá observarse todo el poblado. La previsión es que esta segunda fase de la pasarela esté terminada este mismo año.