Xilxes propondrá, en el pleno de octubre, congelar todas las tasas e impuestos municipales y rebajar en un 3% el tipo del IBI. Dichas medidas tendrán efecto desde el 1 de enero del 2015. El alcalde, Vicente Martínez, se mostró muy satisfecho de haber alcanzado este reto. “Por fin podemos dar curso al doble objetivo que teníamos al inicio de la legislatura: adaptar la economía a los tiempos de crisis y tomar medidas para rebajar” la presión fiscal. RD