La exdirectora del Institut Valencià d’Art Modern (IVAM), Consuelo Císcar, remarcó ayer que este centro cultural era «auditado» de forma anual, a través de una auditoría externa, auspiciada por la Conselleria de Hacienda, lo que, según Císcar, garantizaba que la transparencia «estaba clara».

La exresponsable del IVAM, que está siendo investigada por presuntos delitos de malversación de caudales públicos, prevaricación y falsedad documental por irregularidades en la gestión del instituto, se pronunció así en el pleno del Consell Valencià de Cultura (CVC). Este órgano consultivo debatió ayer al respecto del anteproyecto de ley de este espacio cultural. El informe, presentado por la consejera Ana Noguera, se ha emitido a petición del conseller de Educación, Investigación, Cultura y Deporte, Vicent Marzà.