Los colegios oficiales de dentistas de la Comunitat han registrado en los tres ejercicios comprendidos en el periodo 2013-2015 un total de 361 reclamaciones por parte de pacientes, de las que casi la mitad (47%) procede de clínicas marquistas o franquicias, aunque estas representan el 4% del total de centros de las tres provincias. Siete de cada diez reclamaciones tienen un motivo clínico, y dentro de ellas los implantes lideran el listado de quejas (41%), seguido de las ortodoncias (23%) y los tratamientos conservadores (21%). A juicio del presidente del Colegio de Dentistas de Castellón, Victorino Aparici, estos datos «revelan el descontrol» que vienen denunciando y que «debe regularse como ya se hace en otros países europeos, empezando por la publicidad sanitaria agresiva que llevan a cabo algunos de estos centros».