La dirección general de Justicia finalizará esta semana el plan de aprendizaje dirigido a funcionarios para que sirvan de formadores en la adaptación del personal a la nueva oficina judicial y fiscal.

Estas oficinas implicarán, según la Generalitat, un nuevo sistema de gestión apoyado en las tecnologías de la información y la comunicación para funcionar con criterios de agilidad, transparencia y eficiencia en la gestión.