La renovación de los miembros del Consell Jurìdic Consultiu (CJC), retirada del orden del día del pleno de Les Corts de este miércoles por decisión de PSPV y Compromís alegando a la falta de paridad de género, fue ayer el detonante para que el síndic de Podemos, Antonio Montiel se sintiera traicionado por sus socios de gobierno, acusara al president Ximo Puig y a la vicepresidenta Mónica Oltra de deslealtad, para pasar finalmente a la amenaza de ir por libre a partir de este momento.

Por su parte el portavoz socialista, Manolo Mata, trató de restar hierro a la situación y llegó a asegurar que la formación morada contribuirá a «buscar una solución y no a generar un problema», en una línea similar a la de las manifestaciones de la diputada de Compromís Mireia Mollà.

Al margen de las valoraciones de estos dos partidos que firmaron el Pacte del Botànic junto con Podemos, Montiel acusó al PSPV y a Compromís de «incumplir» y «contradecir el espíritu» del acuerdo de gobierno en el proceso de renovación del CJC, por lo que alertó de que desde ahora obrarán «en consecuencia».

Montiel se pronunció así en los pasillos de Les Corts sobre la petición del PSPV de retirar del pleno la votación de tres miembros del Consell, porque no cumple la paridad --que fue secundada por Compromís--, y sobre la decisión «unilateral» del Consell de nombrar en octubre pasado a los tres miembros designa el Ejecutivo.

«Creo que han jugado de manera desleal», aseveró el portavoz de Podemos, quien adelantó que a partir de ahora la actitud de este grupo será «mucho más beligerante en la exigencia del cumplimiento de lo pactado».

Tachó la situación de «muy grave», y manifestó que «no puede ser que el PSPV y Compromís tomen un acuerdo unilateral y luego digan a los demás que tienen que llegar a acuerdos».

autonomía // Según dijo, el PSPV «tendrá que entender» que Podemos tenga «un comportamiento autónomo» en las votaciones «y en muchos de los temas» que van a continuar reivindicando, pues se sienten «con capacidad para actuar en conciencia, interpretando el acuerdo del Botánico» como lo recogieron de las organizaciones sociales. «Cuestionamos la forma en la que el Gobierno, en ese síndrome de autoridad del que se ha investido, desprecia a quienes han puesto sobre la mesa los acuerdos que han hecho posible que haya una hoja de ruta de cambio», afirmó Montiel.