El pleno de Les Corts Valencianes aprobó ayer, con los votos a favor del PP y en contra del resto de formaciones, una propuesta no de ley presentada por el grupo popular para respaldar la política industrial del Consell.

Los grupos de la oposición criticaron la “intención propagandística de esta propuesta” o el hecho de que no contempla, a su juicio, cifras reales sobre el porcentaje del PIB valenciano que es atribuible al sector industrial, entre otras cuestiones.

La iniciativa del PP fue defendida por Vicente Betoret, quien aseguró que el sector industrial supone “cerca del 17% del PIB regional” y casi un 18% del empleo. Asimismo, consideró que “el Consell presta un firme apoyo a la industria, elemento estratégico para el futuro de la Comunitat” y destacó las “medidas de impulso previstas para este año, que se concretan y desarrollan en la Estrategia de Política Industrial (EPI) 2010-2015”.

Así, se prevé una inversión de 120 millones de euros en torno a cinco ejes: emprendedores, innovación, internacionalización, financiación y energía.

Por su parte el diputado del PSPV-PSOE, Francisco Toledo, criticó que el Ejecutivo autonómico dedique a política industrial “poco más que lo que dedica a RTVV o la mitad que a los grandes eventos” y denunció se hayan producido recortes en apoyo a la industria mientras se han incrementado los gastos en grandes eventos. “La Comunitat Valenciana es la que más empleo ha destruido, el 25% más que la media española, y los valencianos tienen una renta per cápita 2.598 euros inferior a la media nacional”, añadió ayer.

Toledo recriminó al Consell la deuda de 55 millones de euros que mantiene con los 14 institutos tecnológicos y puso como ejemplo el vinculado con la cerámica, que “tuvo que presentar en diciembre dos ERE, uno extintivo para 22 empleos, y otro suspensivo para los restantes 116 empleos, y la razón fue los 4 millones de euros que le adeudaba la Generalitat”, espetó. Toledo pidió también que se salde la deuda con Ascer. H