Los grupos de Les Corts mostraron ayer su sorpresa ante la propuesta del PP de retirar las subvenciones públicas que reciben la patronal y los sindicatos, y algunos de ellos ven en ello un posible castigo por el apoyo de estas organizaciones a la última manifestación por una financiación justa del pasado día 18.

Así lo dijeron los responsables los distintos grupos tras la junta de portavoces, en la que la portavoz del PP, Isabel Bonig,dio un paso más y ha propuesto una comisión de estudio de la financiación de patronal, sindicatos y partidos políticos, y reformar la ley de participación institucional.

Bonig aboga por abrir las ayudas a todas las entidades empresariales y sindicales y no únicamente a las más representativas, tal como establece la ley, aprobada por el PP, y que, a su juicio, es momento de cambiar para «adaptar» a la realidad «lo que ha sido una tradición». El portavoz socialista, Manolo Mata, dijo no entender qué pretende el PP eliminando esas ayudas, y acusó al PP de pretender «reventar el sistema».

El portavoz de Compromís, Fran Ferri, mostró su sorpresa por el cambio en el PP y se preguntó se debe a la manifestación por la financiación del pasado día 18, que respaldaron tanto la patronal CEV como las organizaciones sindicales. Desde Podem, su portavoz, Antonio Estañ, avisó de que no colaborarán «en la lógica vengativa de la pataleta» si ese es el fin de la propuesta.