La sección segunda de la Audiencia Provincial de Valencia ordena al Juzgado de Instrucción número 21 que reabra, 11 años y cinco meses después y por tercera vez, la investigación del accidente de metro del 3 de julio del 2006, en el que fallecieron 43 personas y otras 47 resultaron heridas.

Según consta en el auto hecho público ayer por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), la Audiencia ordena a la jueza instructora que llame a declarar a los investigados en la causa y que, de no ser necesarias nuevas diligencias, el caso llegue a juicio.

Asimismo, la sala rechaza por innecesarias las restantes diligencias solicitadas por las acusaciones. Este auto deja sin efecto el anterior, de junio del 2017, por el que sobreseyó la causa, y reclama al juzgado que llame a declarar a los investigados, entre ellos la exgerente de FGV Marisa Gracia.

NUEVE RAZONES // Este documento enumera hasta nueve razones para mantener la investigación, entre las que destacan las dudas existentes sobre la posible omisión de la normativa de seguridad, la insuficiente formación del maquinista, la ausencia de balizas que limitasen la velocidad en la curva donde se produjo el accidente y la supuesta inacción por parte de la empresa pública tras haberse producido dos descarrilamientos anteriores al del 3 de julio del año 2006.

Sobre la formación del empleado que dirigía el convoy, el auto dice que «no consta documentada de manera inequívoca y satisfactoria, más allá de la entrega de un material impreso, cuya insuficiencia cabe sostener a partir de las declaraciones de otros trabajadores de la misma categoría».

Asimismo, se incide en que «en el pliego de condiciones de la mercantil Siemens y dentro de la casuística de riesgos se señala el exceso de velocidad en determinados puntos», con lo que ahora los magistrados entienden que se debió prever y no se hizo esta posible circunstancia.

SATISFACCIÓN // La decisión de la sección segunda de la Audiencia Provincial de Valencia contenta a la Asociación de Víctimas del Accidente de Metro del 3 de Julio, cuya portavoz, Beatriz Garrote, aseguró que es la decisión que llevan «esperando desde hace casi 12 años, que se investiguen todas las posibles causas del accidente, más allá del exceso de velocidad». «Hubo otros factores, como el estado del vagón y de la vía o las medidas de seguridad para controlar la velocidad», añadió la portavoz de la entidad, para sentenciar que hasta ahora, la magistrada Nieves Molina «no ha querido investigar nada que señalase a los responsables de FGV ni otras instancias políticas».