La exsecretaria del empresario Augusto César Tauroni María Isabel Castillo ha asegurado hoy en el Tribunal Superior de Justicia que este se refería al exconseller Rafael Blasco como "el conill" (el conejo), aunque también ha reconocido no saber si usaba esa palabra para diferentes personas o situaciones.Según las investigaciones policiales, los supuestos cabecillas de la trama de ONG creada para "desviar" fondos públicos de ayudas a la cooperación, se referían a Rafael Blasco con el apodo de "Roger Rabbit" o del "conejo", algo que Tauroni, el único imputado que está en prisión, ha negado.

Castillo ha declarado hoy como testigo en el caso que se sigue en Tribunal Superior de Justicia valenciano contra el exconseller de Solidaridad Rafael Blasco y otras ocho personas por la concesión de 1,8 millones de euros a la Fundación Cyes (sin relación con la constructora del mismo nombre) en 2008 para cooperación internacional.

Ha explicado que a finales de 2008 o principios de 2009 entró a trabajar para Tauroni como administrativa de la Fundación Hemisferio, y ha añadido que fue amiga de Tauroni durante el tiempo que trabajó allí hasta enero de 2012.

Ha afirmado que este le comentó en alguna ocasión que había quedado alguna vez a comer con Rafael Blasco en su casa de Alzira, y ha negado que Tauroni le diera instrucciones para que tratara con alguna persona concreta en la Conselleria para favorecer sus intereses o que le diera dinero para Blasco.

Preguntada por el fiscal sobre el apelativo que usaba Tauroni para referirse a Blasco, ha respondido: "el conill", aunque posteriormente la de defensa del exconseller le ha preguntado si Tauroni "ha empleado la palabra conejo para muy diferentes personas o situaciones" y ha dicho que no lo sabe.

Respecto a una conversación con su marido en diciembre de 2011, en la que le dice que donde vaya Blasco "montarán sus chiringuitos", ha señalado que en ese momento le habían dicho que no tenían claro que se fueran a dar más proyectos y que estaban viendo "a ver donde iba a recalar el señor Blasco".

Castillo ha dicho no haber intervenido en los proyectos que se investigan y ha asegurado que desconocía la existencia de la Fundación Cyes hasta que salieron en prensa las supuestas irregularidades en la concesión de subvenciones.

En la sesión de hoy también ha declarado como testigo Joaquin Rafael Blasco, trabajador de GSC, una de las empresas de Agusto César Tauroni, quien ha señalado que en 2008 acompañó a Tauroni a una reunión con el presidente de Cyes en Canet porque conocía la localidad, pero que no participó en ella.

Asimismo, ha negado haber mandado ningún correo electrónico con facturas de Arcmed (otra de las empresas de Tauroni) a la Fundación Cyes, y al mostrarle varias enviadas desde una dirección con su nombre, ha dicho que los discos duros "son manipulables" y ha considerado que puede haberse usado esa cuenta para ocultar la identidad de quien lo hizo.

También ha prestado declaración como testigo Alfonso Navarro, administrador único de Arcmed, quien ha dicho que le suenan trabajos con Cyes en 2008, pero no recuerda ni los conceptos, ni las cuantías, ni las facturas, ni siquiera si fue Tauroni quien le nombró administrador de la empresa.