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A contracorriente, liberal y progresista». «Tradición y cultura pairal, heredera directa del legado cultural de Pasqual Tirado y Bernat Artola; música y pintura». Así evoca a Matilde Salvador, José Juan Sidro, miembro del Consell Municipal de Cultura, erudito y conocedor de la obra de la Hija Predilecta de Castellón. Hoy se cumplen 10 años de su muerte. Una mujer «avanzada a su tiempo y que no perdió nunca sus estrechas raíces con su tierra», dice Sidro.

Salvador nació en Castellón un 23 de marzo de 1918. No solo se dedicó a la música, sino también a la poesía y a la pintura (de flores coloristas y santets). Rodeada de un ambiente familiar entre pentagramas, empezó a componer desde bien pequeña y en 1933 consiguió estrenar su primera obra, una pieza coral titulada Com és la lluna. A los 18 años dio su primer concierto junto a su hermana Josefina, violinista.

Se casó en 1943 con su profesor de armonía del conservatorio, Vicente Asensio, y junto a él fue una de las parejas artísticas más relevantes de España.

En plena guerra civil dio a conocer su trabajo al genial Manuel de Falla. Para ella, el granadino era todo un modelo a seguir y sus composiciones tenían el sello de folclore mediterráneo barnizado de Castellón, «como la ópera La filla del Rei Barbut, con libreto de Manuel Segarra, obra cumbre de la compositora», recuerda el propio José Juan Sidro. Una obra que la Orquestra de la Comunitat Valenciana ejecutará en el Palau de les Arts con motivo del 9 d’Octubre.

Plurinacional y pluricultural

Defensora de la pluriculturalidad y la plurinacionalidad, la búsqueda de sus orígenes y de sus antepasados supuso un fuerte vínculo emocional con L’Alguer, en Cerdeña, ciudad en la isla en la que aún se mantiene vivo el catalán. Y se atrevió incluso a musicar poemas del alguerés Rafael Cària.

Estrechamente unida a Miquel Peris i Segarra (más información en página 66), formaron un tándem con el que forjaron un legado de música y poesía irrepetible, «enriqueciendo el patrimonio cultural castellonense», manifiesta Sidro. A destacar su ópera Vinatea, con textos de Xavier Casp, estrenada en el Liceu de Barcelona en 1975.