Silvestre González y Alberto Planell son los directores generales de Marie Claire, responsables de una empresa con 110 años de historia que la Diputación de Castellón reconoce ahora con el Mérito a la Innovación 2017, dentro del Día de la Provincia.

--¿Cómo valoran el galardón otorgado a Marie Claire?

--Con mucho orgullo y agradecimiento a la Diputación por haberse acordado de nuestra empresa y especialmente a los más de 700 profesionales que la conforman y que a lo largo de más de 100 años han hecho posible que Marie Claire pueda recibir hoy esta distinción.

--El galardón reconoce el mérito en innovación. ¿Cuáles son sus puntos fuertes?

--Uno de ellos es el conocimiento del producto. Contamos con una estructura industrial vertical, que nos permite controlar todos los procesos de fabricación y aplicar las últimas innovaciones tecnologías a nuestros productos rápidamente. Otro se centra en la capacidad de adaptar nuestra maquinaria a las necesidades de los clientes. El liderazgo en el sector para colaborar estrechamente con los mayores fabricantes de materia prima (Invista, Nilit, etc) para desarrollar las fibras del futuro es otra fortaleza. El conjunto de ellas ha sido reconocido con el premio Europeo Lycra moves awards por el desarrollo de un nuevo concepto: Stop Carreras. Recientemente, hemos lanzado productos desarrollados con Hilos que emiten rayos infrarrojos (FIR), con beneficios para la salud. En el 2016 hemos conseguido la certificación ISO 13485 para productos sanitarios que desarrollamos para la marca Scholl, y trabajamos para su registro en la FDA y para comercializarlos en EEUU.

--¿Cuál es el secreto de Marie Claire para mantenerse durante 110 años?

--El principal secreto es la capacidad de adaptación a las necesidades de los mercados. Marie Claire se ha caracterizado siempre por su constante evolución, pasando de ofrecer productos de primera necesidad, a productos de moda. Combinamos la moda con fibras de última tecnología, utilizando nanotecnología, micro encapsulación, fusión de fibras, etc.

--También dice el jurado que Vilafranca, donde se sitúa la fábrica, no se entiende sin Marie Claire y viceversa. ¿Qué significa esta población para la compañía?

--Marie Claire nació en Vilafranca y para nosotros ha sido y es un reto poder seguir manteniendo las instalaciones fabriles allí. Desde un punto de vista de responsabilidad social, asumimos como uno de los principios de nuestra política empresarial la no deslocalización de la empresa en Vilafranca. Somos conscientes del impacto que tiene la empresa en la economía de la comarca.

--¿En qué momento se encuentra ahora Marie Claire?

--Pese a la incertidumbre de los mercados, especialmente en el sector textil, donde la competencia de los países asiáticos ha contribuido al desmantelamiento del tejido industrial en Europa, Marie Claire ha sido capaz de adaptar su modelo de negocio, potenciando la parte industrial, desarrollando productos de I+D y expandiendo la marca a nivel internacional, destinando más del 50% a exportación. El 2016 ha sido un año clave para afianzar, entre otros, nuevos proyectos con la firma Reckitt & Benckiser.

--¿Y las expectativas para este 2017?

--El mantenimiento de la cuota de mercado nacional y seguir creciendo en mercados internacionales con la consolidación de productos de valor añadido, así como en el sector sanitario.

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