El fútbol pausado de la era Pellegrini será historia en breve. Tras las primeras semanas de trabajo con Ernesto Valverde al frente del equipo, los componentes de la plantilla del Submarino se están dando cuenta que deben cambiar el chip, ya que a partir de ahora se va a practicar un fútbol en el que la velocidad y la presión serán la tónica predominante. "La metodología de trabajo es diferente. Las sesiones están cambiando", opinan los futbolistas.

No en vano, los defensas del Villarreal están comprobando cómo les toca realizar un esfuerzo extra, ya que Ernesto Valverde tiene fijación obsesiva en la fuerte presión sobre el rival, la recuperación del balón y las salidas con gran velocidad.

Los zagueros deben cumplir su cometido, pero a su vez están observando cómo presionan los atacantes y centrocampistas a los que defienden en los entrenamientos, una circunstancia que destacaron ayer Godín y Ángel.

ESTILO PROPIO

Sobre el estilo de juego que pretende implantar Ernesto Valverde, Ángel señaló que es una forma diferente de trabajar a la de Pellegrini: "Este año el equipo va a correr mucho, pero estamos muy contentos". "La consigna es clara, cuanto más rápido recuperemos la pelota más oportunidades de gol vamos a tener", remarcó el canario.

Su compañero en la zaga, Godín, sueña con "entrar en la Europa League y aspirar a cotas importantes". "Lo bueno es que hemos mantenido la base del año pasado y la plantilla ya está cerrada. Eso para el míster es muy bueno, porque puede trabajar más tranquilamente. Es bueno estar todos juntos ya porque estamos con ganas. Hay que mejorar mucho todavía para llegar a punto al primer partido oficial", dijo.