Tranquila, sencilla y honesta, así es Ana Sansano. Nos encontramos para charlar sobre su trabajo, su presencia en la Feria Internacional de Arte Contemporáneo de Castellón, MARTE, sus proyectos a corto y medio plazo... La conversación entre ambas surge de forma natural, hablamos sin parar durante horas mientras tomamos una manzanilla.
Ineludible no empezar por su experiencia “marciana”. Para la artista de Onda todo fueron buenas experiencias en esta cita que, recordemos organiza Sac Producciones junto al Ayuntamiento de Castellón, la Diputación Provincial, la Universitat Jaume I y Coll Blanc. Sansano encontró galerías que la representan fuera de nuestra provincia y, además de darse a conocer, vendió obra --el motivo principal de cualquier feria--. Al ser esta la primera edición, como es de esperar, confiesa que siempre hay cosas que mejorar, pero elogió la labor y el esfuerzo de una feria de tal envergadura en una ciudad sin una tradición previa.
Entre risas y confesiones por parte de ambas, le pregunté por su forma de trabajar y el por qué de su preferencia por el grafito, a lo que ella contesta que es como mejor se expresa; se siente ella misma cuando dibuja. Es algo que le nace desde pequeña, tiene recuerdos de niña dibujando. Siempre andaba con algún lápiz, dice. Para ella, su obra forma parte de sí misma, y por esa razón tiene que sentirse cómoda trabajando. Y para ello, no duda en enfrentarse a diferentes formatos que le proporcionen volúmenes diversos gracias a un único soporte natural como la madera. Madera que corta según sus necesidades --diferentes medidas y grosores-- y que lija hasta dar con una superficie suave y sedosa de la que poder partir. Sansano busca sensaciones volumétricas, puesto que para ella cada una de sus obras son más bien piezas escultóricas. Juega con la ambigüedad de las formas y texturas, le gusta que la gente se tenga que acercar a observarlas.
De apariencia fotográfica, Ana Sansano utiliza milagrosamente el lápiz solo acompañado por pequeños toques de color, que le proporcionan los colores básicos que utiliza --rojo, azul y amarillo--. Trabaja superponiendo capas sobre una primera lámina blanca que hace que el espectador se sumerja aún más si cabe en sus caminos. A través de esas composiciones hechas a partir de manchas, crea una atmósfera mágica, distinta a la que estamos habituados; son como transparencias, busca un resultado pictórico.
LA IMPORTANCIA DE LA IMAGEN // Cinéfila y apasionada de las imágenes, la artista disfruta y valora una buena fotografía. Una imagen lo es todo. De ahí que se sirva siempre de una instantánea de la que partir antes de dibujar. Deduzco que fotografía mucho carreteras y le pregunto si siempre dibuja infraestructuras de transporte como autopistas. “No y sí. Suelo disfrutar con los espacios, lo cierto es que voy de más a menos. He ido vaciándolos. De grandes autopistas a carreteras comarcales a pequeñas travesías o caminos secundarios”, contesta. Cuando le cuestiono el por qué de los caminos, me dice que porque siente que la vida es un camino que se debe recorrer y siempre son distintos unos de otros. ¿Pero, por qué siempre están tan vacíos? En anteriores trabajos reflejaba espacios transitados por personas, en movimiento ¿Y ahora? Sansano comenta: “Suelo pasar mucho tiempo sola y viajo bastante en coche. Es mi entorno. Hace más de 18 años que dibujo. Supongo que a medida que voy aprendiendo de la vida me doy cuenta de las cosas que son verdaderamente prescindibles e imprescindibles. Y eso se ve en mis piezas. He ido eliminando elementos hasta reducir al mínimo mi expresión artística”.
Artista minimalista. ¡Por qué no decirlo! Sus piezas son pequeños tesoros que esconden una historia. Sansano nos brinda el camino a seguir pero somos nosotros quienes debemos hacerla realidad. Historias asombrosas como las que admira en la gran pantalla, increíbles pero no imposibles.
Su trabajo es liso, sedoso y delicado, no necesita brillos, es simple pero precioso al mismo tiempo. Cuando admiras cualquiera de sus paisajes, no puedes reprimir el sumergirte en ellos. Sientes una atracción inmediata hacia la pureza que se refleja en cada una de ellas que hace que quieras poseer sus piezas.
Ana Sansano es una mujer disciplinada que trabaja todos los días en su taller de Orpesa, no por obligación sino por placer. Necesita dibujar. Afortunadamente le apasiona su trabajo. Artista comprometida, no deja de luchar para hacer de su pasión su profesión. Es optimista y está en una buena etapa de su vida. En breve inaugurará su exposición ‘Sentido Figurado’ en la galería 33, en Valencia, una muestra donde como bien indica el título todo se percibe desde su sentido figurativo.
La manzanilla se termina. Un placer de compañía. Caminamos juntas hasta el Tombatossals y cada una prosigue su camino, de vuelta a casa.
