El Amics del Bàsquet Castelló logró ayer algo más que una simple victoria ante el colista. Ganó el partido, pero sobre todo ganó sensaciones, especialmente la de sentirse ganador tras la dolorosa derrota de la jornada anterior ante el Getafe. Una sensación que llega en buen momento, cuando sólo quedan unos pocos días para disputar la Copa Adecco LEB Plata, el próximo 7 de febrero.

Los castellonenses salieron como motos, especialmente Alberto Fernández que encadenó tres triples seguidos, lo que unido a una buena defensa y otras acciones acertadas se tradujo en una arrollador parcial de 19-3 en solo cinco minutos que empezaba a dejar el partido encarrilado.

El combinado vasco pidió un tiempo muerto y salió en parte del atasco ofensivo que tenía, pero el Amics estaba de fiesta y anotaba de cualquier manera. La defensa en zona planteada por los vitorianos no les sirvió para cambiar la decoración y se llegó al término del primer cuarto con 32-15 en el marcador.

Los de Toni Ten no bajaban la intensidad defensiva pese a que la renta local estaba en torno a los 20 puntos. Al descanso, 56-36, y en la reanudación siguió el festival. Manu Rodríguez anotó una serie de 6 de 9 en triples y los canteranos Jordi Rabassa y Unai Lacalle dispusieron de minutos. H