Lo primero es ganar. Hay veces que jugamos bien y no ganamos». Con esa reflexión resumió Koke el partido del Atlético en el Villamarín, donde los rojiblancos se llevaron los tres puntos asumiendo muy pocos riesgos, más pendientes de protegerse atrás que de buscar la portería de Adán.

El 26% de posesión, el segundo más bajo del campeonato tras el 23% que tuvo el Espanyol en el derbi contra el Barça, refleja lo que fue el Atlético, aunque Simeone se acoge a la estadística de la clasificación para refrendar que esa es la línea a seguir. El Atlético continúa invicto en Liga y suma 19 partidos consecutivos sin conocer la derrota a domicilio (la última vez que cayeron fue en Vila-real hace un año).

A los rojiblancos, con Griezmann ausente por lesión, les bastó el gol de Saúl, tras un centro pasado del croata Vrsaljko, para finiquitar a un Betis en caída libre (2 puntos de los últimos 15 posibles) y al que tienen tomada la medida (el Atlético no pierde en el Villamarín desde el 2006).

El Betis pudo empatar en dos acciones del exazulgrana Tello que abortó un enorme Oblak. Cuando los verdiblancos intensificaron su dominio, Simeone no se cortó y reforzó la defensa con otro central, formando una línea de cinco. «El Atlético defiende de diez, es una roca», explicó el defensa marroquí Feddal sobre la mejor cualidad de su rival.