A falta de conocer la trascendencia que adquiera su gol con el tiempo, Paco Alcácer se ganó la porción de mérito si el Barça conquista la Liga. Como Mathieu el primer año de Luis Enrique o Munir en el segundo, una aparición del fichaje más discutido de la temporada -con permiso de André Gomes- le brindará todos los elogios negados hasta ahora por permitir al Barça seguir la estela del Madrid. En el escenario donde el campeón revalidó el título, vivió momentos de zozobra ante el mismo Granada débil y temeroso que solo fastidió un rato con el 1-1. Habría sido una condena injusta e inmerecida, porque el Barça solo cometió un error. Un despiste defensivo azulgrana, el único, derivó en el gol del momentáneo empate de Boga, que Alcácer desarmó. El otro nueve de la plantilla completó el trabajo que había iniciado el nueve titular, que le dio la asistencia y le colocó en camino hacia la gloria. Si será duradera o efímera, se verá pronto. Rakitic y Neymar, en el último minuto con su gol número 100, dieron color a una victoria imprescindible. Las paradas de Ochoa y los postes evitaron que fuera más llamativa.

LESIÓN DE RAFINHA // Cuando se tiró al césped, sus compañeros lo miraron preocupados, temiéndose lo peor. Y parece algo serio. No hay manera de que Rafinha encadene semanas sobre el campo sin sufrir percances físicos. «Espero que no sea nada importante, porque es un jugador que tiene un papel importante», admitió Robert Fernández. «Tiene una lesión en el menisco interno de la rodilla derecha», anunció en principio el Barça a través de un comunicado médico sobre el brasileño. «Pendiente de más pruebas para saber el alcance exacto», aclaró después el club.